lunes, 5 de octubre de 2015

Baby boom

Que bueno que estamos en el 2015, año en el que alguien años atrás imaginaría con autos voladores e inventos fantásticos, y por supuesto una mentalidad totalmente diferente, la igualdad de derechos es algo que se daba por hecho para esta época. 

Ahora vamos a la realidad, los autos siguen paseando por tierra, siguen largando humo molesto y haciendo ruido, más los de esos que aman que se sienta cuando llegan aunque a nadie le interese, con un caño de escape grande como una chimenea, y por supuesto la música haciendo competencia con el ruido del motor, la cual ni los de afuera ni los de adentro logramos descifrar.

Lo de los inventos fantásticos no sé si puedo hablar de eso, capaz un smartphone cuenta como invento fantástico como la tv en algún momento, aunque de la misma forma la gente le atribuye su estupidez y pocas ganas de interacción "real" a un aparato inanimado que no puede ejercer control de su mente de ninguna forma, pero el autoconvencimiento es el arma de control más fuerte; con respecto a eso, que facilidad tiene la gente para engancharse con teorías conspirativas. Mi celular marca una hora más porque el gobierno quiere que sea más productivo y llegue más temprano a trabajar un domingo, o directamente que llegues en hora. Mmm no.
Ahora con los derechos, yo sé que en Uruguay todo cuesta aunque en materia de derechos nos creamos muy avanzados, se sigue luchando por los derechos de todos, y a riesgo de sonar como una feminista de mierda, de esas que creen que deben invertir totalmente los roles para decir que estamos igualados, de esa gente que cree que quitar "privilegios" y depositarlos en otras personas hace que el mundo se iguale, quiero entender por qué hasta hoy las mujeres se ven a sí mismas como una fabrica de bebés y que luego que los crean, deben dedicarse exclusivamente a ellos y al cuidado de la casa en función de un tipo que las provee de todo lo que necesitan económicamente, en serio, nos tenía mas fe, en la teoría todo eso es tan pasado de moda, pero después lo veo todo el tiempo. Mujeres quejándose que los tipos no valoran su trabajo en la casa, y niñas pensando que alguien tiene derecho a juzgar su personalidad por su aspecto.
Y que es esa concepción de que si soy mujer y no quiero tener hijos es algo raro o que capaz más adelante se me va a despertar, no sé, aguante la reproducción pero qué necesidad de tratar de convencerme a mi que no me dura ni un cactus.
Es más, he generado como un rechazo a los embarazos y a los bebés, me encantan los nenes pero cuando ya podes tener mínima interacción con ellos, no me gustan cuando son una cosa tan chiquita que parece que se rompen, y sinceramente me cansé de ver fotos de panzas de embarazadas en tooodooos los meses, saber que hermoso es tener una vida creciendo dentro tuyo expresado con algún extenso posteo en facebook, las ecografías donde por más que trate no veo absolutamente nada de lo que se supone que debes ver, me parece que es como una de esas imágenes que usan los psicólogos que vos decís lo que ves en una mancha,  las fotos del nacimiento, de los escarpines que le tejió la abuela, el babero que dice soy de (el pariente que toque en visita) y la cara de la reciente madre que en su vida subiría una foto así pero como tuvo un hijo todo está permitido.
Gracias gente, pero hay cosas que prefiero que sigan donde estaban, en su vida privada, no me molesta saber que tenés un nene pero no quiero ver su cordón umbilical, ni la primera vez que le cambian el pañal; no quiero ser mala onda pero yo también debí ser tierna y desagradable a la vez pero por suerte no existían las redes sociales y esa necesidad de mostrar todo, de expresar todo, para eso podrían hacer como yo, escribir un blog sobre cosas que a nadie le importan y que por suerte poca gente va a querer leer, no me obligues a bloquearte porque capaz cuando tu nene tenga dos años me va a parecer tierno verlo.

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